En la jornada de hoy, un grupo de vecinos del barrio Aldana se reunió para exponer la crítica situación que enfrenta su comunidad, centrada en una vivienda abandonada ubicada en la Calle Coronel Vaiviene al 2052, cerca de la parroquia San Juan Bautista. La denuncia detalla problemas graves de salubridad y seguridad que han deteriorado la calidad de vida de los residentes de la zona.
La casa en cuestión ha sido convertida en un vertedero, acumulando basura y generando un fuerte olor nauseabundo que afecta a los moradores aledaños. Mónica, representante del foro vecinal, compartió que la situación ha persistido durante dos años. “El propietario anterior tapió la casa, pero al poco tiempo robaron las chapas y desde entonces esto quedó a cielo abierto,” explicó. Los vecinos han repetido sus reclamos a la municipalidad, sin obtener respuesta efectiva.
El abandono del inmueble ha provocado la presencia de personas en situación de calle que pernoctan en el lugar, generando inseguridad y temor entre los residentes. “Hemos tenido incidentes preocupantes, como intentos de abuso, y sabemos que algunos individuos utilizan la casa para actividades ilegales,” añadió Mónica. La oscuridad en la zona, agravada por un árbol frondoso, ha convertido este espacio en un punto de encuentro peligroso.
Los vecinos han documentado su postura, recibiendo apoyo de profesionales de la salud que han alertado sobre los riesgos sanitarios derivados de la situación. “Esto representa un foco de infección y un criadero de ratas, afectando no solo a quienes viven cerca, sino también a los negocios en las inmediaciones,” comentó un vecino preocupado.
A pesar de los carteles de intimación realizados por la municipalidad al propietario de la vivienda, la solución efectiva no ha llegado. “La intervención municipal ha sido escasa y la situación empeora día a día. Necesitamos que se actúe con urgencia,” pidieron los vecinos.
Las autoridades locales están en la mira, mientras los residentes viven con el miedo constante de que la situación se deteriore aún más. La comunidad del barrio Aldana lamenta que un problema que no debería ser tan difícil de resolver persista, exigiendo una pronta acción de las autoridades competentes.