En la mañana de hoy, la localidad de Mburucuyá se encuentra en el centro de una conmovedora manifestación liderada por familiares, amigos y miembros de la comunidad en demanda de justicia por la trágica muerte de Iván, un joven de 17 años, quien fue atropellado el pasado sábado en cercanías del Paraje El Caimán. La abogada querellante de la familia, la doctora Clarisa González, se unió a la protesta frente al juzgado de Santa Rosa para plantear la magnitud del reclamo.
La reacción de la comunidad no se hizo esperar después de que se conocieran los detalles del incidente, inicialmente marcado por la confusión respecto a la conducta de la conductora del vehículo. Según la abogada González, la mujer, una docente de San Miguel, no se dio a la fuga tras el atropello, permaneciendo en el lugar mientras la policía tomaba acción. En el momento del hecho, la conductora fue detenida y posteriormente se le cambió la calificación a “homicidio culposo”. Sin embargo, la defensa de la familia insiste en que los cargos deberían ser más severos, calificándolo como “homicidio con dolo eventual” debido a que la conductora estaba supuestamente bajo los efectos del alcohol al momento del atropello.
La doctora González explicó que aún se están esperando los resultados de las pruebas de alcoholemia, ya que en San Miguel no hay capacidad para realizar estos exámenes en el lugar. Sin embargo, el informe médico y testimonios de testigos sugieren que la conductora estaba gravemente alcoholizada. “Los oficiales que intervinieron confirmaron que ella no podía mantenerse en pie, lo que demuestra claramente que estaba incapacitada para manejar”, añadió González.
La comunidad se ha movilizado de manera significativa, acompañando a la familia en su dolor y exigiendo justicia. “No solo es una familia destrozada, sino toda una comunidad que clama por un cambio en la responsabilidad al volante, especialmente de alguien que tiene antecedentes de conducción ebria”, subrayó la abogada.
Este caso ha puesto sobre la mesa un debate crítico sobre la seguridad vial y la necesidad de una mayor protección para los más vulnerables, reforzando la importancia de sanciones más duras para quienes eligen conducir bajo los efectos del alcohol. La protesta continúa mientras los manifestantes piden que se escuche su voz en el sistema judicial, exigiendo que se haga justicia por Iván y por todas las víctimas de la irresponsabilidad al volante.
