“Tenemos que prepararnos para un periodo mínimo de un año. La pandemia no será un problema de poco tiempo”, señalaron encargados de las obras en el Hogar Escuela. El nuevo equipamiento es vital para los respiradores de terapia intensiva.
La puesta a punto del nuevo Hospital de Campaña “Hogar Escuela” continúa a paso firme con la suma de nuevos equipos y arreglos en la infraestructura edilicia.
Ayer llegó un tubo para el suministro de oxígeno a los pacientes con COVID-19 que puedan necesitar asistencia respiratoria.
El secretario de Infraestructura Escolar, Emilio Breard, comentó detalles exclusivos de los trabajos que se realizan en el predio para acondicionarlo en perspectiva a una pandemia de un año de duración.
“El tubo será para alimentar a los respiradores del ala de Internación, donde se ubicarán las camas destinadas a las personas que necesiten respiración asistida. El sistema va colocado por las paredes y es similar al que ya tiene el hospital Pediátrico”, precisó el funcionario.
Los técnicos explicaron que por la cantidad de camas y la amplitud del lugar (20.000 metros cuadrados), el consumo de oxígeno será el mismo que el que se utiliza en todos los establecimientos sanitarios del sistema público de la provincia, pero en un solo lugar. Un promedio de 100.000 metros cúbicos de oxígeno por mes.
Sobre las otras tareas que avanzan día a día, Breard detalló: “Las refacciones incluyen techos, cubiertas, instalaciones eléctricas, pinturas, aberturas y las redes sanitaria (baños y cloacas)”. Incluso, se avanzó con otros servicios y complementos más específicos como Internet, acondicionadores de aire y pinturas aislantes para las áreas de laboratorio.
Las autoridades planean inaugurar el hospital antes de la primera semana de mayo. Todas las intervenciones procuraron preservar el valor cultural y arquitectónico del Hogar Escuela, un sitio destinado a niños huérfanos inaugurado el 17 de octubre de 1952.
En la actualidad, allí residían 800 alumnos divididos en los niveles Inicial (120), Primario (300) y Secundario (380).
Consultado sobre la posibilidad de transformarse en un sanatorio permanente, Breard fue cauto y dijo que la decisión estará en manos del Gobernador.




























