El municipio capitalino asegura que el último mes no se registraron denuncias al respecto y que las empresas son controladas por un esquema de triple monitoreo del que participa Nación.

 

 

Simplemente la gente no se queja porque está resignada a un mal servicio. En otro momento, las quejas de los usuarios por las demoras de los colectivos marcan un tema recurrente.

 

 

Durante los horarios pico, es común escuchar en las paradas de ómnibus quejas de todo tipo a causa largos períodos de espera, algo que perjudica a quienes deben cumplir horarios estrictos en sus trabajos o estudios.

 

 

Usuarios regulares del transporte público, comentaron que diariamente deben esperar entre 30 y 40 minutos para subir a una unidad.

 

 

Las demoras provocan que algunos se vean obligados a tomar remises para cumplir con el horario de entrada de trabajos e instituciones educativas.