En la última década nació una revolución ya que comenzaron a aparecer, desde laboratorios científicos, los primeros “tejidos funcionales”. Un equipo de investigadores del Conicet liderado por la doctora Manuela Kim, la Fundación Argentina de Nanotecnología y una Pyme argentina, especializada en la fabricación de trajes de protección para bomberos, se encuentran desarrollando telas ignífugas con propiedades aislantes de alta performance.
Desde radio UNNE, la doctora Kim, explicó que "en el grupo de investigación desarrollamos una serie de telas con el uso de nanotecnología". Agregó que "se trabaja en los trajes de bomberos buscando básicamente que los mismos puedan disminuir de peso, ya que normalmente sus trajes son pesados y tienen distintas capas con barreras térmicas y de humedad que pueden pesar alrededor de 15 kilos promedio".
“La tela está hecha en base a fibras de aramidas modificadas por una película delgada de nanopartículas de sílica que forman estructuras ultralivianas con capacidades aislantes a temperaturas extremas”, sostuvo la doctora.
Agregó que "con el trabajo en laboratorio se logró mejorar las propiedades de la fibra para que la tela pueda aislar del calor, pero sin impedir la respirabilidad, algo indispensable, ya que debe permitir la evaporación de la transpiración del usuario. Si no fuera así los bomberos terminarían bañados en sudor y no podrían trabajar”.
El grupo de investigación de la doctora Kim está integrado por científicos del INTI, del CONICET y cuenta con el financiamiento de una empresa privada que apoya el conocimiento científico para la creación de esta nueva tecnología.
La experta consideró que "es muy importante trabajar en conjunto para que el conocimiento científico y la tecnología se puedan aplicar a la realidad con soluciones concretas".
"La nueva revolución que se viene es la de la nanotecnología y lo que queremos es unir estos dos grandes mundos, el textil y el del conocimiento científico, para crear nuevos trajes más funcionales" finalizó la doctora Kim.
