El Ejecutivo correntino asistió a los tres llamados hechos desde Casa Rosada, en menos de 10 días. Buscan acordar un presupuesto que cumpla con las metas del Fondo Monetario Internacional y, al mismo tiempo, tenga el menor impacto en jurisdicciones.
Esta semana, funcionarios nacionales recibieron en Casa de Gobierno a gobernadores aliados y ministros de economía provinciales, con el objetivo de anticipar el diálogo prespuestario del año que viene, funcional al cumplimiento de pautas establecidas en el acuerdo crediticio con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Primero fue el gobernador Gustavo Valdés quien concurrió al encuentro con el presidente Mauricio Macri, el martes. Al día siguiente, hicieron lo propio los ministros provinciales, entre ellos el correntino de Hacienda y Finanzas José Enrique Vaz Torres, quienes activaron el aspecto técnico de las conversaciones con sus pares nacionales de economía Nicolás Dujovne y de Interior Rogelio Frigerio.
Algo que repitieron el jueves, con una intención clara: buscar consensos para el diseño de un esquema fiscal que permita al estado nacional y jurisdicciones federales, cumplir con pautas internas y a la vez ajustarse a las metas requeridas en el acuerdo con el FMI para el préstamo de 50 mil millones de dólares.
El punto central para alcanzar este equilibrio consiste, según los protagonistas de los encuentros, en “achicar el déficit fiscal”.
Para esto, Nación promueve un ahorro de $300 mil millones para cumplir con las expectativas del organismo crediticio y ofreció un menú de alternativas que por estas horas son blanco de análisis por parte del titular de la cartera económica provincial.
Entre las posibilidades, está trasladar el 33% de ese ajuste a las jurisdicciones federales, y el resto que corra por parte del estado nacional.
El ministro de Hacienda y Finanzas, José Enrique Vaz Torres, aseguró que hasta el momento “tenemos conversaciones sobre montos globales, aún no se llegó al nivel de jurisdicciones”, y agregó que en ese marco “Nación discute, de todos los programas que posee, cuáles son los que se podrán optimizar, financiar con otras fuentes, los que pueden sustituirse por otros”.
También se evalúa “cuáles son aquellos transferibles a las provincias para que estas reciban fondos y administren de manera más eficiente que Nación”, comentó Vaz Torres aclarando que “no se trata de una resignación de recursos” sino que “se trata que haya una convergencia hacia el equilibrio fiscal de la Nación y lógicamente, las decisiones que Nación tome en materia presupuestaria, todas las erogaciones, las inversiones que Nación hace desde su presupuesto impacta en el territorio de todas las provincias; porque cuando hablamos de cuestiones sociales, de infraestructura, lógicamente cualquier cuestión no financiada genuinamente en el funcionamiento del Estado nacional impacta en las provincias también”.
“Lo que está discutiendo la Nación con las provincias es de qué manera se puede establecer algún parámetro que no lesione la equidad y el equilibrio entre las jurisdicciones, fundamentalmente en lo referido a los gastos discrecionales, aquellos que decide la Nación por si y tiene impacto en las provincias”, sintetizó el titular de la cartera económica provincial.