“Buscamos concientizar a la gente en el uso de casco, sobre todo en el caso de las motocicletas, también con relación a la cantidad de personas que pueden circular sobre una motocicleta, y siempre verificando la documentación obligatoria”, detalló el director general del Cuerpo de Agentes de Tránsito, Ricardo García.
Como en cada operativo, a los motociclistas se les solicita la documentación correspondiente (licencia de conducir, cédula verde o azul según el caso, comprobante de póliza de seguro) y se alerta sobre el correcto uso del casco del conductor y acompañante. En el caso de los automovilistas se verifica, además, la utilización del cinturón de seguridad. En caso de no contar con la documentación obligatoria, los agentes proceden al secuestro del vehículo.
Las intervenciones tienen como objetivo garantizar el cumplimiento la ordenanza 3202 de la Municipalidad de Corrientes, de adhesión a la Ley Nacional de Tránsito Nº 24.449. “Algunas personas se resisten por estar en falta, pero en la mayoría de los casos la gente colabora y entiende la importancia del trabajo que estamos haciendo. Esto tiene que ver puntualmente con una tarea preventiva de siniestros viales”, aseguró García.
El operativo fue nuevamente acompañado por agentes de las fuerzas de seguridad pertenecientes a la Policía provincial y a la Agencia Nacional de Seguridad Vial, quienes asisten con apoyo logístico a los agentes municipales.
Se trata de un trabajo que viene llevando adelante la Subsecretaría de Tránsito en diversos puntos de la ciudad, con el objetivo de mejorar la circulación de vehículos y, de esta manera, la seguridad de los vecinos. Simultáneamente a los controles, se entrega folletería informativa sobre las normas viales.
EL CASCO, FUNDAMENTAL PARA SALVAR VIDAS
Según datos de la asociación civil Luchemos por la Vida, distintos estudios realizados en el mundo coinciden en el efecto protector del casco para reducir lesiones en la cabeza y muertes en choques de motos y bicicletas.
Un sumario de los principales estudios realizados en el mundo asegura que el uso del casco: disminuye el riesgo y la gravedad de las lesiones en un 72 por ciento aproximadamente. A su vez, disminuye el riesgo de muerte en, al menos un 39%, ello dependiendo de la velocidad de los vehículos involucrados. Asimismo, disminuye los costos de salud asociados a los choques.
En caso de impacto, el casco puede prevenir muertes, ya que absorbe parte de la energía del impacto con su estructura, y el cerebro golpea contra el cráneo con menos fuerza. Dispersa la fuerza del impacto en una superficie más grande, por lo que la energía del choque no se concentra tanto en una sola parte de la cabeza, y actúa como barrera que evita el contacto entre el cráneo y el objeto del impacto (por ejemplo, el suelo).
Para que el casco actúe eficazmente es fundamental que esté correctamente colocado, y que sea del tamaño acorde con la cabeza, quedando fijo y sin movimiento. Debe ser reemplazado luego de un choque y/o después de 3 a 5 años de uso.
Existen diferentes diseños de casco y que brindan diferente protección. Los cascos integrales son los que protegen más, dado que también brindan protección facial, de la mandíbula y del mentón.