Apenas pasadas las 17.30, la antorcha olímpica inició este sábado su recorrido por las calles correntinas, en un hecho sin precedentes para la historia deportiva de la ciudad. El intendente Eduardo Tassano, junto al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el gobernador, Gustavo Valdés y el viceintendente, Emilio Lanari; acompañaron el fuego sagrado, que fue encendido por el medallista olímpico Carlos Mauricio “Camau” Espínola.
El joven tenista Lautaro Midón, de tan solo 13 años, fue el primero en recorrer las calles con la antorcha. El joven representante del club San Martín de Corrientes, fue seguido por el taewkondista Mauro Crismanich.
La siguiente fue la vecina de la ciudad Mariana Isabel Romero, quien ganó su lugar gracias a un concurso en las redes sociales. Luego fue el turno de la reconocida taekwondista Noemí Prone, quien pasó la llama a la bailarina Karina Lencina, que se presentó con su traje de carnaval.
Yuri Maier, luchador olímpico en estilo greco – romano, recibió de manos de Lencina el fuego, para pasárselo a Jonatan Leyes, levantador de pesas. Luego fue el turno de la rugbier Leticia Alcaraz, quien se lo pasó al joven atleta Dan Gamarra.
Un momento emotivo se vivió cuando la llama pasó a la deportista de básquet en sillas de ruedas María Florencia González Cabañas, en la Costanera, quien fue acompañada por la multitud. La representante de básquet adaptado entregó finalmente el fuego a la ciclista siete veces campeona Cristina Greve.
Greve fue la encargada de recorrer el tramo final en el parque Cambá Cuá, donde encendió el pebetero para dejar encendida la llama de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018.
