En el contexto del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, Marita Sartor, docente de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), comparte su conmovedora testimonio sobre el impacto del exilio y la lucha por la justicia en Argentina durante la última dictadura cívico-militar.

Nacida en Francia en 1981, Marita es el producto de un contexto de persecución política que llevó a sus padres, Jorge y Elsa, a abandonar Argentina con sus hijas en busca de seguridad. En un relato que se comparte en un reel en redes sociales, Marita hace eco de la valentía y el amor que marcaron su infancia, aún en la adversidad, mientras su madre enfrentaba el reto de maternar en la clandestinidad. “El miedo era constante. Mis padres salían a trabajar sin saber si regresarían”, recuerda.

El regreso a Argentina en 1984 trajo consigo la ilusión de retomar la vida, pero también el desafío de reconstruirse en un país que aún guardaba las huellas del horror. A lo largo de su carrera docente, Marita ha mantenido un enfoque en la justicia y los derechos humanos, señalando que su historia personal siempre ha influido en su labor educativa. “La docencia para mí debe priorizar el bienestar de los estudiantes y los valores de diversidad y solidaridad”, sostiene.

Su testimonio destaca la importancia de la memoria y la transmisión de esta a las nuevas generaciones, enfatizando que la historia no es solo del pasado, sino una lección para el futuro: “Esto le pasó a alguien con quien conviven diariamente”. Marita valora la iniciativa de la UNNE de fomentar la memoria, reconociendo la necesidad de hacer palpable la historia con el objetivo de construir un país más justo y humano.

En sus interacciones con sus hijas, Marita ha sido la portadora de valores fundamentales que aprendió de sus padres. Su legado es la resistencia frente a la injusticia y la esperanza de un futuro en el que la memoria colectiva sirva como pilar de la sociedad.

La Universidad Nacional del Nordeste reafirma su compromiso con los derechos humanos, honorando a aquellos, como Marita, que han luchado por un país más solidario y libre, recordándonos que la memoria es crucial para avanzar hacia un futuro que no repita los errores del pasado.

Con información de Medios UNNE