El colombiano, recordado por su polémico arbitraje en el Lanús-River del 2017, y el peruano fueron designados para impartir justicia en las idas de los cuartos de final ante Liga de Quito y Cerro Porteño, respectivamente.
La Conmebol designó este viernes a los árbitros para la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores 2019: Wilmar Roldán dirigirá Liga de Quito-Boca (21/8), a 2850 metros por encima del nivel del mar, mientras que Víctor Carrillo impartirá justicia en el duelo entre River y Cerro Porteño (22/8) en el Monumental.
El colombiano Roldán es recordado por no haberle cobrado al Millonario una mano de Iván Marcone dentro del área de Lanús en el Sur por la semifinal de vuelta de la Libertadores 2017. Aquel 31 de octubre, el equipo de Marcelo Gallardo vencía 2-0 al Granate tras el 1-0 de la ida y parecía que se encaminaba derecho a la final.
Sin embargo, más allá de la enorme gesta del equipo de Jorge Almirón, el árbitro y el VAR, a cargo de Andrés Cunha, tuvieron una incidencia directa en el desarrollo del juego, ya que tampoco sancionaron ni revisaron el golpe de puño que Román Martínez le aplicó a Ariel Rojas en la jugada del tercer gol. El 4-2 final terminó con celebración para el Granate. Por su parte, el peruano Carrillo -fue el cuarto árbitro en el Lanús-River de 2017- cae bien en Núñez, ya que el equipo obtuvo cuatro victorias en los cinco partidos que lo dirigió, entre Copa Sudamericana, Recopa Sudamericana y Libertadores.