El goleador del Mundial pudo haber aumentado el marcador para Inglaterra pero falló en dos oportunidades en la misma jugada. Le cobraron un offside que no fue.

Inglaterra consiguió rápidamente algo que cuesta y significa mucho en el fútbol actual: abrir el marcador. Pero antes del final del primer tiempo tuvo una inmejorable chance para marcar el segundo y en los pies de un delantero como Harry Kane que no suele fallar, sin embargo el máximo artillero del Mundial erró un gol imposible, y por duplicado.

El goleador del Tottenham quedó mano a mano con Subasic que achicó y tapó de gran manera pero el rebote quedó otra vez en sus pies. Con poco ángulo volvió a intentarlo y la pelota fue rechazada entre el pie del arquero y el palo. El juez de línea levantó la bandera cobrando un offside inexistente que de haber sido gol, hubiera obligado a la intervención del VAR.

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