Racing vivió cuatro días para el olvido. El lunes cayó 3-1 con Colón y se quedó sin chances de jugar la Libertadores 2019. Y este jueves fue eliminado por Sarmiento de Chaco, del Federal A, en otra pobre actuación colectiva. Un papelón.

Por eso el equipo se retiró silbado e insultado por su gente de la cancha de Banfield, un escenario que por un tiempo no va querer pisar porque le trae malos recuerdos. Aquí quedó eliminado la Copa pasada ante Olimpo (4-2 tras ir ganando 2-0) y le costó muchísimo superar a Mitre de Santiago del Estero en la anterior, además perder con el Taladro en la Superliga. Para Sarmiento, la gloria, que aguantó los últimos 20 minutos con un jugador menos.

La primera etapa fue bastante pobre en lo futbolístico. Racing intentó un poco más que Sarmiento, tuvo la iniciativa pero le faltó claridad sobre todo de tres cuartos para adelante. Hubo pocas llegadas y poca conexión entre los dos delanteros, Centurión y Lautaro Martínez. Y si bien Martín Ojeda se movió bastante bien por izquierda, no tuvo profundidad.

Sarmiento lo esperó ordenadito, recortando espacios. Entonces, le resultó difícil a Racing adaptarse a una cancha mojada. También imponerse a un equipo aguerrido, que jugó fuerte, por momentos con exceso de juego brusco, que contó con la complicidad del árbitro Ariel Penel, quien dejó pegar muchísimo y recién expulsó a Gonzalo Alarcón a los 27 minutos del segundo tiempo, cuando Sarmiento ya ganaba 1-0.

La derrota con Colón fue un duro golpe que influyó en el juego en Banfield. Hubo demasiadas imprecisiones en los pases, y parecían pasado de revoluciones, como les había sucedido el otro día ante Colón pero y en desventaja. Por eso, con poquito, Sarmiento preocupó.

No se notó la diferencia de categoría. Ni la inactividad: los chaqueños no jugaban oficialmente desde el 22 de abril. Quedó en evidencia su tibio ataque porque el entrenador Raúl Valdez ubicó como único delantero a Luis Silba, el goleador del Federal A. Sarmiento explotó bien el sector izquierdo, muy permeable, porque Pillud se destacó en la proyección pero falló en la marca. Sorprendió a los siete minutos con un remate de Orzán, de buen despliegue, que se fue por arriba. En la sequía de situaciones de gol, Racing tuvo la más clara en los pies de Centurión, que definió mal.

El Chacho Coudet intentó cambiar la historia en la parte final y probó con cuatro delanteros. El que más intentó fue Centurión pero a Martínez se lo devoraron los centrales chaqueños. Le costó todo demasiado, llenó de centros y de hombres el área rival, sin éxito.

Ojeda tuvo un mano a mano y en la contra Sarmiento sorprendió con ese golazo de Orzan. En el final, hubo un penal a Centurión que Penel ignoró pero que no modificaría la floja respuesta colectiva de Racing ante un equipo modesto y heroico.

Fuente: clarin.com