Aparecieron camisetas argentinas teñidas de sangre en las afueras del predio del Barcelona, donde entrenó la Selección, y se acrecentó el temor por la presentación del equipo de Jorge Sampaoli en Jerusalén.
Después de muchas idas y vueltas, se suspendió el partido amistoso entre Argentina e Israel. El match estaba programado para el sábado, a las 15:30 de nuestro paìs.
La protesta de un grupo de personas en apoyo al estado palestino tenía como objetivo evitar que los argentinos visiten Tierra Santa y se negaban enérgicamente al partido programado antes de viajar a Rusia para disputar la Copa del Mundo.
La Asociación del Fútbol de Palestina le había solicitado la cancelación del encuentro a la AFA.
“Este partido es como que nosotros celebráramos el aniversario de la ocupación de Malvinas, esto sería una aberración, una falta de respecto y una agresión al sentimiento del pueblo argentino”, dijo Husni Abdel Wahed, embajador palestino en Argentina, como para que nuestro país entienda la magnitud de su indignación.