Mañana deberían jugar Independiente y Villa Mitre (Bahía Blanca), pero los capitanes de ambos equipos ya se manifestaron en contra de disputar el encuentro, algo que podría desencadenar en la reprogramación o la suspensión del torneo.

“La postura es no jugar el partido de mañana”. Así de contundente fue la frase con la que el capitán de Independiente, Silvio Romero, manifestó lo que cree su equipo: el partido de mañana entre el Rojo y Villa Mitre (Bahía Blanca) por la Copa Argentina debería suspenderse.

Desde el lado del club bahiense, la opinión es la misma: “Se está viviendo un momento difícil y creo que no nos tenemos que exponer. Han parado en todo el país y todo el mundo y creo que lo mejor es no jugar”, sostuvo Agustín Cocciarini, capitán de Villa Mitre.

Por lo pronto, el encuentro sigue en pie y tendrá lugar mañana desde las 21.10 en el Estadio Ciudad de Lanús. De todas maneras, los dos equipos han sido contundentes y no quieren saber nada con salir a la cancha.

A pesar de que se mantenga la programación, lo cierto es que el propio Sergio Marchi, Secretario General de Futbolistas Argentinos Agremiados, aseguró que “se respetará la voluntad de los jugadores” a la hora de definir si se sigue jugando o no, por lo que ese partido parece tener las horas contadas.

De esta manera, el futuro de la Copa Argentina pende de un hilo y podrían haber novedades en las próximas horas que indiquen la reprogramación o suspensión del torneo. Dicha situación, además, podría ser interpretada como una decisión anticipada de lo que sucederá en las reuniones entre Superliga, AFA y Agremiados en los próximos días, ya que los jugadores de prácticamente todos los clubes manifestarían su oposición a la continuidad del fútbol en el país en todas sus competiciones.