La contrabandista de divisas Nelma Kodama afirmó que todos los detenidos en el escándalo sufrían presiones para convertirse en delatores premiados y lograr la libertad a cambio de involucrar al ex presidente.
La delación premiada, principal instrumento de la operación Lava Jato, quedó hoy bajo sospecha luego de que una contrabandista de divisas, la primera condenada en el caso, revelara que todos los detenidos en el escándalo sufrían presiones para aceptar ser “arrepentidos” y liberados a cambio de involucrar al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva en asuntos ilegales.
Se trata de Nelma Kodama, quien agregó aún más munición a los críticos de la Operación Lava Jato, que se encuentra bajo fuego periodístico luego de las filtraciones de los mensajes entre fiscales y el ex juez Sérgio Moro, hoy ministro de Justicia, para supuestamente manipular las investigaciones en busca de condenas.
“Lula era el asunto, yo no soy de ningún partido y no hablo de política y sí de delitos. Había este tipo de conversación entre quienes querían salir de la prisión”, dijo Kodama sobre las negociaciones de delaciones premiadas llevadas a cabo por la fiscalía de Curitiba, centro de la Operación Lava Jato desde 2014, a Radio Bandeirantes.
Kodama, considerada la mayor contrabandista de divisas de Brasil, es la ex mujer de Alberto Youssef, el cambista ilegal que delató que lavaba dinero de Paulo Costa, un ex director de la petrolera Petrobras que respondía al Partido Progresista (PP), que formaba parte de la base de apoyo al gobierno de Lula (2003-2010).
TELAM