La viuda de Daniel Muñoz, Carolina Pochetti, quedó presa. El juez federal Claudio Bonadio rechazó la excarcelación, en sintonía con el dictamen del fiscal Carlos Stornelli, por los riesgos procesales de liberarla: el riesgo de fuga y la posibilidad de entorpecer la investigación. Es que los investigadores tienen una sospecha clara: que la mujer intentó destruir computadoras cuando supo que estaba por ser detenida. Lo prueban unos discos duros incendiados y una notebook destruida que encontraron en su vivienda, revelaron a Infobae fuentes judiciales.
La mujer quedó a disposición del Servicio Penitenciario Federal. Aunque aún no trascendió si irá a las unidades femeninas de Ezeiza o a Marcos Paz, las fuentes consultadas por este medio señalaron que quedará bajo el programa Iric, el mismo que agrupa a los presos sospechados de corrupción y bajo el cual están Julio De Vido, Amado Boudou y Ricardo Jaime.
Ayer, llorando, Pochetti le dijo que no sabía nada del dinero de su esposo. Afirmó que nunca había dudado de su marido y que le costaba entender que le hubiera mentido. Incluso aseveró que ahora se sintió una estúpida por haberle creído.
Sin embargo, fuentes judiciales tomaron con pinzas sus declaraciones como acusada, sin obligación de decir verdad. Y pasaron revista a las pruebas que la ubican en la cadena de sociedades que se movilizaron para lavar unos 70 millones de dólares con la compra y venta de propiedades en Miami y Nueva York.
En los pasillos de tribunales, además, se comentaba el escenario que se encontraron los policías que participaron del allanamiento en la casa de Pochetti, en el barrio de Saavedra: una pileta descubierta, otra pileta climatizada y un microcine para 15 personas. Allí vivía con sus dos hijos, de 16 y 20 años, fruto de un matrimonio anterior al que tuvo con Daniel Muñoz.
Allí los agentes detectaron discos externos quemados y una notebook destruida, que ahora buscarán analizar para saber si de allí puede salir alguna información vital para la causa.
Pochetti se entregó ayer en los tribunales de Comodoro Py y pasó la noche en la unidad de Drogas Peligrosas. Hoy volvió a la sede judicial donde se notificará que quedará detenida en la causa de los cuadernos. Se descuenta que la defensa apelará a la excarcelación en la Cámara Federal.
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