Yamil Santoro, analista y abogado, cercano a la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dijo “lo que el protocolo de seguridad permite es que las fuerzas federales ante una situación de peligro inminente, en una situación grave o de muerte, tanto para un oficial como para cualquier ciudadano, se autoriza a las fuerzas de seguridad, debiendo  dar la señal de alto e identificarse como miembro de la fuerza de seguridad, en caso de que el delincuente no desista, poder usar fuerza letal. Esto es un cambio, antes se habilitaba el uso de la fuerza letal cuando había disparo contra ellos, lo que hacía que los policías no se quisieran someter a cuestiones de riesgo o no defiendan a las personas debidamente”, dijo.

 

De la misma manera, en comunicación con “ De regreso” (La Red Corrientes 107.1), explicó “no se trata de una cuestión unilateral, va en línea con los principios de uso de arma planteado por la ONU, en un documento de los 90, que la Argentina  incorporó a nivel que faculta esto, del uso de fuerza letal, debiendo agotarse instancias previa de uso de fuerza no letal. Se adecua a algo que ya rige en el mundo, el gobierno anterior tenía una visión de desarme y de no intervención de las fuerzas de seguridad, lo que redundó en que muchos veces los efectivos policiales no tuvieran herramientas para enfrentar situaciones graves”