Tres días antes de concretarse uno de los actos más simbólicos de reparación histórica para el pueblo de Saladas, la restitución de los restos del Sargento Juan Bautista Cabral, fue suspendida de manera sorpresiva y sin una nueva fecha confirmada. La decisión, comunicada por la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, cayó como un balde de agua fría entre autoridades locales y provinciales, y abrió un abanico de especulaciones sobre los verdaderos motivos de la postergación.
La noticia llegó a la Municipalidad de Saladas apenas horas después de que se confirmara oficialmente la participación de la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, en el acto previsto para este sábado 2 de agosto.
“En horas de la mañana nos confirmaron desde Vicepresidencia la presencia de Villarruel, y por la tarde recibimos una notificación de la Comisión Nacional avisando sobre un inconveniente burocrático que ponía en duda la realización del evento”, relató ayer el intendente de Saladas, Noel Gómez, en declaraciones radiales.
Gómez expresó su desconcierto y remarcó que el proceso para el traslado de los restos del héroe correntino había sido planificado con tiempo, con avales y coordinación de todas las partes implicadas: “El proyecto fue presentado el año pasado, aprobado y trabajado en conjunto con el Gobierno de la Provincia. De golpe nos piden una intervención que no estaba prevista”.
La versión oficial sostiene que la postergación se debe a la falta de un acuerdo formal por parte del Ministerio de Defensa y la Provincia de Corrientes. Sin embargo, desde el entorno municipal no ocultan su sospecha de que la situación responde a un trasfondo político.
El anuncio de la vicepresidente Victoria Villarruel de participar el acto, habría sido el detonante para que el gobierno nacional suspendiera el acto.
Una historia que se repité: la disputa entre actores nacionales que deja de lado la historia y una acción en la que Corrientes es protagonista.