Finalmente la abuela Catalina estuvo frente a la jueza, en el marco de un procedimiento judicial. Este viernes se produjo la instancia de declaración y allí la mujer avanzó con un tema que podría ser la punta del ovillo de la causa: una controversia familiar que habría derivado en la venganza, con Loan como moneda de cambio.
Catalina Peña aseguró que vendió sus tierras de 9 de Julio a un vecino porque tenía miedo de que sus hijos la despojaran. La mujer de 87 años prestó testimonio ante la jueza Cristina Pozzer Penzo tras casi seis horas, luego fue controlada por una médica y almorzó.
La anciana aseguró que enajenó las propiedades a un vecino de nombre Ibarrola con el fin de que sus hijos no se entrometan en esa situación. Este dato fue ratificado judicialmente, y que ya había sido expuesto ante los medios de comunicación.
El jueves en De Regreso con Martin Varela el periodista Daniel Bruno (corresponsal en la causa) había adelantado esta posibilidad, en base a los dichos de la mujer.
Este viernes en los pasillos judiciales, se escuchó que esa persona, de apellido Ibarrola, podría tener un vínculo con Maria Victoria Caillava.
Culminada la jornada, el lunes la jueza podría avanzar con nuevas medidas en el marco de la causa, casi al cumplirse dos meses de la desaparición del niño.