De acuerdo a los datos aportados por uno de los menores en Cámara Gesell por el cado Loan, apareció la figura de “el hombre encapuchado”, el que “tenía una cicatriz o tatuaje en el lado derecho de la cara”.
La declaración de este menor, es lo relevante de las últimas horas en el marco de la causa que lleva adelante la justicia federal. Sin embargo, las fuentes consultadas indicaron que esa declaración no estuvo en la primera Cámara Gesell.
En esa oportunidad los niños si habían hablado “del hombre malo”, lo que los peritos entienden que podría tratarse de la misma persona.
La justicia cumple esta semana con la indagatoria al entorno familiar, cerrando en círculo con la abuela Catalina, aún sin fecha para comparecer ante la jueza Cristina Pozzer Penzo.
Los investigadores ponen el acento en el entorno familiar, sin descuidar el resto de las hipótesis aunque este punto es el que presenta mayor grado de certezas, pero todas ellas aun sin los elementos concretos para poder establecer una caratula definitiva.