Los propietarios de Residencia del Litoral han sido imputados por el delito de “abandono de persona, seguido de muerte” en relación al caso del fallecimiento de un anciano en la institución. El suceso ocurrió cuando el hombre desapareció de la residencia y fue encontrado sin vida en una zanja cercana.
El anciano en cuestión es Héctor Estigarribia, de 72 años, cuyo cuerpo fue descubierto en febrero pasado, a pocos metros de la entrada del geriátrico donde estaba alojado.
Este martes se hizo público que los dueños de la Residencia del Litoral han sido imputados por el delito de abandono de persona seguida de muerte. El caso ha generado conmoción y preocupación en la comunidad.
Héctor Estigarribia, quien padecía Alzheimer, Parkinson y demencia senil, estuvo desaparecido durante varios días después de salir de la residencia ubicada en la Ruta Nacional 12, cerca de los barrios Ponce y Pirayuí. Se presume que salió a través de una puerta sin llave.
Días después de su desaparición, se encontró su cadáver en las cercanías de donde fue visto por última vez. Previamente, su hijo había encontrado un golpe en la cabeza del anciano en las oficinas de EME (Emergencias Médicas), aunque no se encontró constancia ni documentación relacionada con este incidente. De manera misteriosa, toda evidencia de dicho golpe desaparecido.
Otro aspecto sospechoso es que las cámaras de seguridad del lugar no registraron la salida del hombre, y algunas imágenes de las mismas se encontraron borradas.
Este caso ha generado un gran revuelo y una profunda preocupación en la sociedad, ya que pone en evidencia la necesidad de garantizar el cuidado y la seguridad de los residentes en instituciones geriátricas. La imputación de los propietarios del geriátrico es un paso importante en la búsqueda de justicia y el esclarecimiento de los hechos ocurridos en torno a la muerte de Héctor Estigarribia.