Bernard Giudicelli, presidente de la FFT, aseguró que este plan permitiría mantener al menos “una parte del modelo económico, los derechos televisivos y los patrocinios”. El torneo ya fue aplazado hasta septiembre.
El presidente de la Federación Francesa de Tenis (FFT), Bernard Giudicelli, no descartó que el torneo de Roland Garros, segundo Grand Slam de la temporada que fue aplazado hasta septiembre por la pandemia de coronavirus, se juegue a puertas cerradas.
El responsable de la FFT aseguró al semanario Journal du Dimanche que este plan permitiría mantener al menos “una parte del modelo económico, los derechos televisivos y los patrocinios”.
El torneo francés es un motor económico para el tenis nacional y representa cerca del 80 por ciento de los ingresos de la federación, según el semanario. Solamente los derechos de difusión suponen más de un tercio de la facturación de la competición.
Sobre la posibilidad de retrasar el Roland Garros del 20 de septiembre al 27 dijo que “no cambiaría gran cosa” y que todavía es pronto para determinar con precisión el calendario.
En cualquier caso, el presidente de la FFT señaló que no descartan ninguna opción y que “dar prioridad” a una de las alternativas que se barajan sería “perderse en conjeturas” por la falta de visibilidad en relación a la emergencia sanitaria. “Pueden pasar muchas cosas a nuestro alrededor. Nos mantenemos concentrados en lo que tenemos que hacer, ofrecer un torneo en las mejores condiciones”, indicó.