Ayer se reunieron supermercadistas con autoridades del Ministerio de Industria y el lunes volverían a encontrarse. La iniciativa es hacer una canasta de productos básicos. El consumo y el aumento constante de precios preocupan al sector.
Fue la primera reunión que se dio entre el Ministerio de Industria, Trabajo y Comercio con los representantes de los supermercados locales y las cadenas internacionales. Una de las alternativas es establecer una lista de productos básicos, similar a la de Precios Cuidados.
“Estamos viendo de qué manera podemos colaborar el sector público y privado para encontrar un tipo de paliativo para el momento que se está viviendo”, expresó José Ahmar, Subsecretario de Comercio de la provincia.
El lunes habrá una nueva reunión en la que cada uno de los sectores hará una propuesta y así, se tratará de ajustar detalles para que en el corto tiempo pueda aplicarse esta alternativa.
“A nivel nacional tenemos Precios Cuidados y nosotros queremos ver qué podemos proponer a nivel local”, explicó Ahmar.
La idea es armar una lista de productos básicos y pactar un precio pensando en las familias de bajos recursos. En principio, el sector de los supermercadistas estaría de acuerdo, ya que podrían armar algo acorde al stock y a la mercadería prioritaria para la gente de la provincia.
“Para nosotros es acertado hablar de una canasta local, y nos convence más, ya que podemos atender las necesidades de nuestros clientes”, señaló Raúl Rogido, gerente de una de las cadenas de supermercados.
Desde la Provincia, la propuesta de beneficios para el comerciante podría ser similar a la que tienen los comerciantes con las Canastas Navideñas y Escolar. “Debemos hacer un aporte, tanto del sector público como privado, en este caso en los productos de primera necesidad”, indicó José Ahmar.
“Los representantes de los supermercados nos comprometimos a elaborar una lista, pero que cada uno de los sectores ponga algo, así todos podemos hacer una propuesta interesante a la gente”, explicó Rogido.
Constantes
cambios de precios
Los supermercadistas plantearon ayer los constantes aumentos de precios por parte de los proveedores que los obliga a efectuar movimientos en las góndolas.
“La única alternativa que tenemos es pelear con los proveedores para retrasar un poco el impacto en la góndola de manera inmediata”, señaló Raúl Rogido, y agregó: “Nosotros dependemos de nuestro stock, porque si hay faltante de mercadería, no tenemos margen de negociación”.
El consumo bajó de manera considerable respecto a igual mes del año pasado.
Un gran porcentaje de los clientes realiza compras con tarjeta de créditos y opta por hacerlo en cuotas. “Estamos preocupados por la inflación y tratamos de asegurar una canasta con precios medianamente acomodados”, explicó Rogido.
Fuente: diariepoca.com