La Selección Argentina de rugby se impuso por 25-15 ante la de Nueva Zelanda en el Tri-Nations y cortó una maldición de 28 derrotas y un empate.

Los Pumas lograron un triunfo histórico ante los All Blacks, a los que doblegaron por primera vez, por 15-25, en el marco del torneo Tri-Nations de rugby. De esta manera, Argentina acabó con su maldición ante el combinado de Nueva Zelanda, al que no había sido capaz de ganar en los 29 encuentros precedentes, saldados con un empate y 28 derrotas.

En el estadio Bankwest de Sídney, sin embargo, Los Pumas cambiaron su suerte y se impusieron por 15-25. “Jugamos por los chicos, por el rugby argentino. Hay un montón de chicos que no juegan al rugby con sus amigos desde hace ocho meses y salimos a la cancha a demostrar que se puede y ojalá traiga más gente al rugby”, aseguró Pablo Matera tras el partido.

Los propios Pumas sufrieron en sus carnes las consecuencias de la pandemia. Estuvieron meses sin jugar y tuvieron que entrenarse en la distancia, desde sus casas, hasta hace diez días. “Fueron 8 meses muy duros. Un montón de trabajo, de un montón de gente que no está acá, pero tenemos un equipo con mucha hambre y vinimos a llenarle el pecho de orgullo a toda la gente en Argentina”, sostuvo Matera.

Por su parte, Mario Ledesma recordó: “El día que llegó Cheika dijo: ‘quiero ser parte del primer equipo argentino que le gana a los All Blacks’. Estamos muy agradecidos de lo que vivimos, con todo lo que pasa en Argentina. Hasta en los momentos de tensión decís ‘soy un privilegiado'”.

Ledesma explicó asimismo que antes del comienzo del choque “no parecía real estar sentados en la cabina esperando un partido después de todo lo que pasamos”. “Hay cosas que son difíciles de explicar, hubo mucho intangible que se fue juntando. Pero no hubo dudas en el desarrollo del partido. Es lindo ver los frutos. El triunfo valida un poco todo lo que se hizo desde principio de año y a la distancia”, remarcó.