Suspendió la Megafinal y en 48 horas queda afuera. La Justicia ordenó la liberación del socio de River, Matías Sebastián Firpo, único detenido por la agresión al micro que llevaba a Boca Juniors hasta el estadio Monumental para disputar la segunda final de la Copa Libertadores, tras reconocer su responsabilidad en un juicio abreviado en el que fue condenado a dos años y cuatro meses de prisión en suspenso.
Firpo estaba imputado por delitos de daño agravado, lesiones leves agravadas, atentado contra la autoridad e impedir la realización de un espectáculo deportivo masivo.
Dentro de las reglas de conducta, el condenado no puede concurrir a las inmediaciones del estadio River Plate, ni podrá tener acceso al estadio de River Plate por el tiempo de la condena, así como tampoco podrá concurrir a eventos futbolísticos masivos por el tiempo de la condena.
Firpo deberá hacer 180 horas de tareas comunitarias, hacer un curso de convivencia urbana.
La jueza María Julia Correa resolvió acordar la pena en suspenso tras una audiencia en la que participaron la fiscal Adriana Bellavigna y el defensor Vallejo.
Entre otras restricciones, Firpo no podrá pisar un estadio de fútbol y tendrá que mantenerse alejado del Club Atlético River Plate.
La Policía de la Ciudad detuvo el martes a Firpo, a quien se lo identificó como uno de los que tiró proyectiles en la esquina de Libertador y Lidoro Quinteros.
Ayer, las autoridades de River Plate resolvieron que se le abra un sumario y se eleve un pedido de expulsión del club.
