El defensor de Ferroviario empezó a palpitar el encuentro de ida del domingo ante Mandiyú, resaltando una paridad a pesar de que se enfrentará contra un equipo lleno de juventud que “corren todo el partido”.

“Llegamos bien, tranquilos. Fue pesada la semifinal porque Invico fue un rival fuerte pero supimos aprovechar las oportunidades, pasamos a la final y estamos esperando con ganas que llegue ya el domingo”, empezó diciendo Joel Badaró esta tarde en La Red Deportiva.

Al momento de responder sobre cómo juega la presión, explicó que “va a ser un lindo partido, van a llevar mucha gente pero nos puede jugar a favor o en contra como a ellos. En la cancha somos once contra once y tenemos que saber llevar la experiencia de cada uno porque ellos son pibes pero corren todo el partido. Tenemos que saber aprovechar la experiencia que tenemos adelante, en el medio y atrás”.

“No tenemos que confiarnos, ojalá que sean finales cerradas pero que nos favorezcan. Mandiyú pasó cómodo la semifinal pero sabemos que las finales se juegan de otra manera”, agregó.

Sorprendido por cómo se definió la semifinal entre Mandiyú y Curupay, entendió que la final “va a ser totalmente distinta, una final con cancha llena y va a ser otro tipo de partido con respecto a las semifinales que jugamos los dos”.

En cuanto a las claves para el domingo, advirtió que Ferroviario “siempre propone el mismo juego: Mazzon está haciendo un excelente trabajo, nos pide apretar arriba, no dejarlos jugar y creo que eso nos llevó a estar en ese puesto sabiendo que tenemos buena delantera. Tenemos que tener el cero en el arco y después Kuchack o Barreto te la mandan a guardar”.

Por último, habló de las obligaciones de uno y otro, explicando que “los dos tenemos la obligación de tratar de ganar: Ferro siempre jugó el Federal B y Mandiyú es una institución grande y los dos tenemos la obligación así que esperemos que sea una linda final”.