El piloto correntino mostró su preocupación ante la imposibilidad que afronta la disciplina debido a la cuarentena dictada por el Gobierno Nacional a raíz del COVID-19. “Tendría que volver a corto plazo”, dijo el integrante del TC Pista recordando que la actividad “mueve más de 40 mil familias”.

Muy lejos del tono esperanzador de su anterior contacto, indicó que “todo está atado directamente a la cuestión sanitaria, y es complejo orquestar y organizar para que la actividad arranque. Lo cierto es que tiene que arrancar de manera urgente, de lo contrario va a quedar un montón de gente dañada en cuanto a lo económico. Los equipos están sin trabajar, hay estructuras que la están pasando realmente muy mal. Hay equipos que están al borde de desaparecer y tengo entendido que no hay otra alternativa que empezar, y no es comenzar nomas, sino comenzar a un costo que los equipos puedan solventar”, explicó Humberto Krujoski a La Red Deportiva (La Red Corrientes 107.1 MHZ).

“¿Cuántos autos pueden arrancar? ¿Cuántos equipos estarían en condiciones?”, se preguntó, agregando que “hay un tiempo de preparación; hay un montón de logística que lleva un tiempo poner a punto pero me parece que hay que tomar una decisión para decir que va a tener que arrancar en tal fecha, respetar los protocolos que ya se han presentado. La Asociación Argentina de Volantes tenía prevista una reunión con el Gobierno y se postergó -me enteré hoy-, así que es lamentable en ese sentido. El automovilismo en Argentina mueve más de 40 mil familias, entonces hay mucha gente que está directamente afectada”.

Para el correntino, “tendría que volver en el corto plazo. La idea siempre fue julio-agosto pero tiene que arrancar, en otros países ya comenzó, y acá es cuestión que el automovilismo tenga la manera de regresar, es bastante posible desde mi punto de vista. Va a ser más ordenado que esos que salieron a correr en Buenos Aires y se va a poder lograr algo mejor que eso”.

Luego dio a conocer su pensamiento sobre la forma en la que podría volver la actividad, controlando el viaje de los equipos, por ejemplo. Sería sin público y aprovechando la televisación, siempre según sus impresiones.

Siempre en el mismo tono crítico ante la situación, expresó que “hay que sentarse a pensar en esta actividad que mueve fábricas, elementos, un montón de proveedores que están con las fábricas cerradas y un montón de familias. Le pasa lo mismo que a todo el mundo y debería ser atendido de igual manera”.

Además, se podría competir fuera de Buenos Aires y de los lugares más afectados ya que “el automovilismo es muy federal, se viaja a más de 10 provincias en 15 fechas, así que en ese sentido no habría problemas”.