Oscar Natalio Bonavena, más conocido como Ringo, era manejado por el siciliano Joe Conforte, que tenía una historia particular: llegó a los 11 años a Estados Unidos y después de manejar un taxi, a los 29 se abrió un prostíbulo ilegal en Nevada.

 

Varios meses en prisión por intentar coimear a un fiscal y algunos años preso por evasión de impuestos fueron los primeros pasos de Conforte, que recién a los 41 años tomó el control de “Mustang Ranch”, ahora sí de manera legal.

 

Por sus problemas en prisión, era Sally Conforte (esposa de Joe) quien hacía de manager de “Ringo”.

 

Fue entonces cuando el 15 de mayo de 1976, Joe organizó una fiesta en una sede del “Mustang Ranch” que se inauguraba, y Bonavena asistió, a pesar de los crecientes rumores del romance entre Oscar y Sally.

Bonavena, fanático de Huracán y considerado una leyenda en Parque Patricios; esa misma noche, tuvo una fuerte pelea con Williard Ross Brymer, hombre de confianza de Joe Conforte, que tenía antecedentes por amenazas a una mujer y narcotráfico.

 

Lo peor ocurrió al día siguiente, cuando Brymer se vengó de la paliza recibida y quemó el trailer donde vivía Bonavena. Conforte le prohibió la entrada al prostíbulo.

 

El viernes 21 de mayo, Bonavena le pidió a Dora Raffa, su mujer en Argentina, que rezara por él porque estaba preocupado; que volvería a Buenos Aires el 24 de mayo, pero antes tenía que arreglar un asunto.

 

Así fue, cuando a las 6 de la mañana del 22 de mayo de 1976, “Ringo” llegó a las puertas del “Mustang Ranch” pidiendo entrar a gritos.

 

Brymer no lo pensó dos veces, y disparó directo a su corazón: Oscar Bonavena murió en el acto.

 

“Actué en defensa propia. Le ordené que se quedara quieto. Metió la mano en el zapato, tenía un arma, entonces le tiré”, manifestó Brymer, sentenciado a dos años de cárcel que no se cumplieron por la fianza de 250 mil dólares que pagó Conforte.

 

Brymer falleció el 27 de junio del 2000.