El dólar se movió otra vez al alza hoy en la plaza local y en la región, con lo que volvió a ubicarse por encima de los $46 para la venta al público (cerró a $46,36 promedio), en una jornada en la que lo que llamó la atención fue el salto que su cotización pegó en los últimos minutos de la rueda.

La sensación que quedó es que mercado intentó comenzar a probar la verdadera libertad y vocación de intervención sobre la plaza del Banco Central (BCRA), luego de haber logrado -hace 10 días- vía libre del FMI para hacerlo -si lo considera necesario- aún cuando la cotización no llegue al congelado techo de $51,45 de la ahora desdibujada banda de flotación.

La misma surge de observar la evolución que tuvo en el día la plaza cambiaria local, que reflejó una tendencia global de regreso a la aversión al riesgo, al revivir los temores a una guerra comercial entre Estados Unidos y China.

Esto hacía que el peso (-0,45% hasta entonces) se volviera a devaluar tanto como el promedio del resto del monedas emergentes hasta minutos antes del cierre.

Sin embargo, se desacopló de esa tendencia general en la última media hora de la rueda, es decir, cuando el BCRA ya había convalidado un nuevo recorte de 29 puntos a la tasa de referencia (quedó en 73,24% promedio) pese a retirar otros $800 millones de circulación con la venta de Leliqs.

Y en especial, afirmó ese recorrido alcista una vez finalizada la segunda subasta de divisas del Tesoro con la venta de otros US$30 millones (son US$60 millones por día) a un valor promedio de $45,08.

En ese momento “se corrió el grueso de la oferta privada” pese a las posturas de compra cargadas en el sistema, lo que “tiró los precios para arriba hasta el cierre a $45,33”, coincidieron en detallar a La Nación distintos operadores.