Así lo aseguró la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti. La funcionaria señaló cómo, según su óptica, el retiro del Estado limitó las posibilidades de responder al brote.

El reciente rebrote del sarampión, tras décadas de estar casi extinto, puso en alerta a la salud pública. Y esta mañana, la secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, se refirió al tema en una entrevista radial con una radio de Buenos Aires.

“Estamos con un brote de sarampión desde agosto. Tenemos 144 casos, que parecen poquitos, pero si uno piensa que el último episodio endémico había sido en el año 2000 y que entre 2001 y 2018 tuvimos 44 casos importados o relacionados con la importación, tener 144 ahora y una primera muerte desde 1998 es una situación de mucha relevancia y preocupación, que nos cuesta muchísimo poner en agenda”, indicó. 

Por otra parte, la funcionaria señaló que el sarampión es un virus que se transmite “muy fácil, mucho más fácil que el coronavirus”, pero puntualizó con optimismo: “La buena noticia es que el único reservorio es el ser humano y hay una vacuna que es segura y eficaz se puede controlar”. Ante la consulta de cuánto afectaban los movimientos que se oponen a la vacunación, la especialista consideró: “Los antivacunas son más importantes en Europa, pero en este rebrote de 144 personas afectadas aportan algunos casos las personas que decidieron no vacunarse o no vacunar a sus hijos.

Por otra parte, se refirió a lo que consideró “el retiro del Estado”, en una clara alusión a la gestión anterior y, de paso, elogió a su actual jefe, el ministro de Salud Ginés González García, quien ya había ocupado ese cargo con Néstor Kirchner como presidente.  

“El retiro del Estado del Plan de Vacunación no ha impactado específicamente en la tripe viral, porque era una vacuna que estaba exenta de impuestos, ya que Ginés la puso en la Ley de Emergencia Santiaria de 2003″.  En esa misma línea, agregó: “Pero sí el reitro del Estado hizo que no se priorizara esta situación y no se adquirieran dosis para dar respuesta al brote. Ahora ya hay que distribuir un millón más de dosis y se adquirieron 7 millones, porque lo que hay que hacer es ir a buscar a todas las personas susceptibles y cuando hay un caso hay que ir a bloquear y completar esquemas. Y se necesitan más dosis que las del calendario”.

“Otra responsabilidad del Estado es la articulación con las provincias, que eso también se había perdido y se está trabajando muy fuerte para recuperar”, añadió Vizzotti. A lo largo de la charla, la secretaria de Acceso a la Salud también reparó en otras cuestiones que considera determinantes para la expansión del a enfermedad. “Uno de los problemas es la baja percepción del riesgo. La gente piensa que el sarampión solo son unas manchitas en la piel y nada más, pero es algo que pueda dar neumonía, encefalitis y puede causar la muerte. Fundamentalmente en las personas que tienen las defensas bajas y en los más chiquitos”.

En cuanto a las iniciativas que lleva adelante el Estado, la funcionaria explicó: “En Ciudad y en el Conurbano, que es donde está circunscripto el brote, se están haciendo acciones intensivas de vacunación. Los bebés de entre 6 y 11 meses deben recibir una dosis cero. Al año de vida está la dosis del calendario. Los niños de entre 13 meses y 4 años deben tener dos dosis. Al ingreso escolar es el refuerzo. Y todos los adultos menores de 55 años tenemos que tener dos dosis después del año para estar seguros de que somos todos inmunes”.

La entrevista había comenzado con el coronavirus como eje. Ella habló durante varios minutos sobre las acciones de prevención que está tomando el Estado nacional para evitar que el mismo llegue y se expanda por el país. Sin embargo, sostuvo al respecto.

“En Argentina el coronavirus es una amenaza, pero el sarampión y el dengue son una realidad”.