El empresario santacruceño Lázaro Báez, detenido con prisión preventiva hace más de cuatro años, dejará la cárcel, previo pago de una fianza de 632,5 millones de pesos. Una vez cubierta esa “caución real”, Báez cumplirá prisión domiciliaria con una tobillera electrónica.

Así lo dispuso el Tribunal Oral Federal 4, integrado por los jueces Guillermo Costabel, Daniel Obligado y Jorge Gorini, en cumplimiento de un fall o de esta mañana de la Cámara Federal de Casación, máximo tribunal penal. El TOF 4 se había negado a concederle la excarcelación a Báez, pero aquella decisión fue anulada hoy por los camaristas de casación Mariano Borinsky Javier Carbajo, que le impusieron al tribunal el dictado de un nuevo fallo.

Según la Casación, debía aceptarse la excarcelación de Báez porque ninguna de las partes acusadoras en el proceso pidieron que siguiera preso.

Báez podría dejar entre hoy y mañana la cárcel de Ezeiza, donde está detenido desde 2016. Si bien el fallo de hoy le concede la excarcelación, Báez no quedará en libertad porque en la causa conocida como “El Entrevero” -donde se investiga la compra irregular de una estancia en 2011- tiene ordenada la prisión domiciliaria.

El TOF 4 dispuso hoy que, además de la fianza y la tobillera, Báez deberá cumplir con otros dos requisitos: tendrá que entregar su pasaporte y presentarse cada 15 días ante el tribunal (como tiene prisión domiciliaria en la otra causa, los jueces deberán resolver cómo cumple con este requisito).

Antecedentes

En el caso en el que hoy se concedió la excarcelación a Báez, el fiscal Abel Córdoba dictaminó por la libertad de Báez y la otra parte acusadora, la Unidad de Información Financiera (UIF), se ausentó a la audiencia en la que se abordó este tema. De esta forma, la UIF se abstuvo de pedir que a Báez se le mantuviera la prisión preventiva.

El 19 de junio, el TOF 4 se había negado a excarcelar al empresario dueño de Austral Construcciones, que fue socio y amigo de Néstor Kirchner, y, contra ese fallo, su defensa interpuso un recurso de casación. Tanto el fiscal de juicio, Abel Córdoba, como el fiscal ante la Casación dictaminaron a favor de que Báez recuperara la libertad con un dispositivo de control electrónico. Eso fue lo que finalmente se resolvió hoy.

Báez está detenido desde 2016, cuando ordenó su prisión preventiva el juez federal Sebastián Casanello , que investigó el caso conocido como “la ruta del dinero k”, una causa en la que Báez es el principal acusado de un presunto lavado de más de 60 millones de dólares.

En esa causa Báez ya no cumple prisión preventiva. El caso por el que sigue preso -donde hoy se ordenó que deje la cárcel- es un desprendimiento de “la ruta del dinero k”, el caso “M&P”, que fue elevado a juicio oral por Casanello en diciembre del año pasado. En esta causa, donde a Báez se lo investiga junto a sus hijos y a una decena de imputados por inyectar dinero de empresas fantasmas en la firma Austral Construcciones, no se fijó todavía una fecha para el inicio del juicio.

El juicio por “la ruta del dinero k”, que comenzó en octubre de 2018, quedó interrumpido por la pandemia de coronavirus y su reanudación ya fue suspendida tres veces.