La investigación arrojó que compartieron sala de espera en el Hospital Elizalde. Ambos evolucionan favorablemente.

Dos bebés menores de un año elevaron de tres a cinco los casos de sarampión registrados en lo que va del año en el país. Mientras se llevan adelante las tareas de investigación para determinar cómo contrajeron el virus, el Ministerio de Salud de la Nación emitió un alerta en el que llama a verificar el estado de vacunación de la población y a intensificar la vigilancia epidemiológica de cuadros sospechosos para evitar la reintroducción de la enfermedad, en el marco de un contexto global con miles de casos, brotes activos y muertes.

Hasta el momento, lo que se sabe es que ambos -el varón de Monserrat, Capital Federal; y la nena de Glew, Provincia de Buenos Aires- compartieron la sala de espera del Hospital de Niños Pedro Elizalde. “Por lo cual la gente del Elizalde está llevando adelante una exhaustiva investigación epidemiológica para intentar determinar la fuente, de quién se contagiaron. Para estar tranquilos y seguros, hallar esa fuente es fundamental, porque eso hace una gran diferencia entre que los casos sean autóctonos, o bien de una fuente importada”, dijo Angela Gentile, presidenta de la Comisión Nacional para la Eliminación del Sarampión y la Rubeóla en Argentina y jefa de Epidemiología del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez.

Además de la investigación para hallar la fuente de infección, las autoridades sanitarias dispusieron el seguimiento y la vacunación de bloqueo a los contactos de los chicos.

Gentile confirmó que afortunadamente la evolución clínica de ambos bebés es buena, pero llamó la atención sobre que en menores de un año la enfermedad puede complicarse y provocar neumonía, neumonitis, encefalitis.

El sarampión es una enfermedad prevenible por vacunación

El sarampión es una enfermedad prevenible por vacunación. Los dos chiquitos de cinco y seis meses que empezaron a manifestar síntomas la semana pasada no estaban vacunados porque la primera dosis se da recién al año de vida. Dependen de la inmunidad colectiva o de rebaño para estar protegidos: cuanta mayor es la proporción de personas vacunadas dentro de la población, menor es la probabilidad de que una persona susceptible entre en contacto con un individuo infectado. Ese “escudo” falló en marzo, con el caso de la beba de 8 meses que se contagió al coincidir en una clínica porteña con un joven de 21 años no vacunado que había contraído el virus durante un viaje a Tailandia, según determinó la investigación.

Los tres bebés, el joven y una chica de 26 años que presentó la enfermedad a su regreso de un viaje por el sudeste asiático son hasta ahora los cinco casos confirmados en el país y que elevan la preocupación por la posible reintroducción del sarampión en el país, que no registra casos endémicos hace 18 años (para que se considere endémico el virus debe circular en forma sostenida durante 12 meses). Desde 2000, sólo se registraron 32 casos importados y vinculados a la importación, por lo que el alerta del Ministerio pone especial énfasis en el “contexto epidemiológico global”.

El informe detalla que en América en lo que va del año se registraron 1951 casos importados o vinculados a la importación. En la región, la situación más complicada la afronta Venezuela, con un brote en curso desde el año pasado; mientras que en Brasil ya son casi 700 los casos. En Europa se se registraron entre enero y mayo casi 15 mil. En Rusia, desde donde acaban de regresar a sus respectivos países cientos de miles de turistas que fueron al Mundial de Fútbol, se notificaron en ese período más de 1000 casos.

“La globalización en general hace que el riesgo sea alto y permanente. El Mundial era una situación de más riesgo todavía, por ser un evento de masa, mucha gente de todo el mundo en un mismo lugar. Y las vacaciones de invierno también. Por eso siempre hay que estar atentos, los brotes en los países de la región son muy importantes. Lo que nos preocupa mucho es que tenemos una cohorte de suceptibles ypueden aparecer nuevos casos”, alertó Carla Vizzotti, presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE).

Es que se hizo en 2014 la última Campaña Nacional de Seguimiento de Vacunación contra el Sarampión y la Rubéola congénita, en la que se aplica unadosis extra obligatoria de la triple viral a niños de 1 a 4 años, independientemente de las que les tocan por calendario, para reducir el número de suceptibles (es decir, los no vacunados o quienes no hayan respondido a la vacuna). Estaba previsto que la próxima campaña se realizara entre septiembre y octubre, pero se postergó a los meses de octubre y noviembre para tener asegurada la provisión de insumos.

“Cuanto más suceptibles haya, más riesgo de brote hay”, advirtió Vizzotti, quien no obstante aclaró que la notificación de estos dos nuevos casos no modifican las recomendaciones sanitarias. Lo importante, destaca, es que toda la población (no sólo los chicos) revisen sus certificados de vacunación: los chicos de 12 meses a 4 años deben acreditar una dosis de la vacuna y los mayores de 5 años dos; mientras que las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque son considerados inmunes. Además, se debe consultar al médico inmediatamente en caso de aparición de fiebre y erupción cutánea.

Fuente: clarin.com