El vicepresidente de la entidad de la ‘Banda Negra’ se refirió al momento por el que atraviesan los diferentes clubes de la ciudad en plena cuarentena por la Pandemia del COVID-19. Su club hoy se puede “auto solventar” aunque no es sencillo. Mientras tanto, trabajan para crear un nuevo espacio en su predio.

Jorge Lecca, exjugador y hoy dirigente del club Pingüinos, dialogó con La Red Deportiva sobre la actualidad de una de las entidades que lucha por sobrevivir a la cuarentena ya que están prohibidas las diferentes actividades deportivas.

“Cada club de la capital tiene su realidad. Nosotros siempre estuvimos generando eventos, desde que asumimos hace dos años aunque anteriormente siempre estuvimos colaborando con arroz con pollo, pizzas, pastelitos, etc. Siempre se generaron eventos para poder sobrevivir y sobrellevar los gastos fijos que se tienen como club. Hoy, afortunadamente, después de muchas gestiones en el club podemos decir que nos auto solventarnos con otro tipo de eventos. Lo seguimos haciendo porque es parte del club, de los amigos, de juntarse, de la familia, del barrio, todos se suman pero para hacer otro tipo de inversiones”, dijo entre sus primeras expresiones.

Al consultarle sobre cuánto cuesta mantener esa entidad, explicó que “tenemos costos fijos de los servicios (luz y agua), de los ‘profes’ a los que les seguimos pagando el sueldo a pesar de la Pandemia, y nos lleva 50 mil pesos aproximadamente. Hoy, al no tener actividad ni chicos que abonen su cuota, se nos hace difícil solventar eso, pero se hicieron gestiones muy buenas como para remodelar, reacondicionar las instalaciones que nos generó poder recibir un alquiler mensual de los locales que están adelante”.

Además, enalteció “el acompañamiento se viene generando con los eventos, ahí es donde uno cae en lo que significa el club. El domingo hicimos un arroz con pollo, y te das cuenta cómo la gente es muy solidaria: la del barrio, los que jugamos algunas vez al básquet, conocidos, familiares… el club cuenta con más de 100 chicos jugando, son más de 100 familias. Son solidarios, se identifican con los colores, con el barrio. Vi un apoyo de la gente del club, no los quiero llamar socios porque nosotros cobramos una cuota de jugador, y hay una familia acompañando detrás. Por ahí se alejan para pagar una cuota pero eso es algo que en el club no ocurre. Siempre se trata de que todos tengan las mismas posibilidades, por más que por ahí no puedan pagar una cuota siempre se generan cosas de ayuda, siempre se consigue porque esa es la esencia del club Pingüinos: de sumar gente, de estar presentes de una u otra manera, y se ve reflejado cuando uno hace un cierre de año, en la cena del club, ahí te das cuenta de la cantidad de gente que hay detrás de esta institución”.

En lo institucional, recordó que “acompañando la gestión, uno de los ítems fue poner en regla los papeles del club para poder recibir los subsidios. Hoy el club está en condiciones legales para hacerlo”, cuando se le preguntó si se presentaban para recibir las ayudas del Gobierno. Por último, adelantó que las obras en Pingüinos no se detienen y que “estamos enfocados en un proyecto bastante ambicioso para el tiempo que estamos pasando: incorporar una cancha de 3×3 en el acceso del club. Nunca se deja de laburar, por más que haya una Pandemia, de gestionar, pero la mayoría de los que estamos en el club somos exjugadores y defendemos los colores a muerte”.