Los dirigidos por Jürgen Klopp vencieron desde los doce pasos a los de Tomas Tuchel y se quedaron con la final del torneo de fútbol más antiguo.

Liverpool se quedó con la FA Cup tras vencer en los penales a Chelsea, luego del empate sin goles en los 120 minutos. Se vieron las caras en Wembley después de lo que fue la conquista de los Reds en la Carabao Cup ante los Blues.

El conjunto dirigido por Jürgen Klopp fue superior en el inicio. Con su característico juego directo, pudo haber abierto el marcador, pero la ineficacia a la hora de definir y las atajadas de Edouard Mendy lo impidieron.

Sin embargo, los londinenses se recuperaron y emparejaron el desarrollo del encuentro. Con situaciones de Christian Pulisic y Marcos Alonso pudieron haberse puesto en ventaja sobre Liverpool, que sufrió las bajas Mohamed Salah, quien salió lesionado a falta de poco más de quince minutos del entretiempo.

El segundo tiempo empezó igual que el primero, pero siendo Chelsea el dominador: contó con tres situaciones inmejorables para adelantarse en el resultado, pero no las aprovechó y la pasó mal al final. Los de Anfield tuvieron chances concretas para quedarse con el título, entre ellas dos disparos en los palos, pero el marcador no se abrió.

A lo largo de los 30 minutos del alargue, en donde no estuvo Virgil van Dijk, quien salió antes de que empiece, no sucedió mucho y se fueron a la tanda de penales, donde los Reds se impusieron por 6-5, tras los fallos de César Azplilicueta y Mason Mount para los Blues. Sadio Mané pudo haber liquidado antes la definición, pero Mendy detuvo su tiro.