En comunicaciòn con Teresita Lotero en “Abierto a la Tarde” de La Red Corrientes 107.1, el doctor en bioquímica,  investigador del Conicet y profesor en Inmunologia de la Facultad de Medicina de la UBA,  Jorge Geffner, habló acerca de la “niebla mental” como una de las  secuelas del Covid-19. 

Una de las secuelas a largo plazo que deja en algunos pacientes el coronavirus es la  dificultad o falta de concentración, más conocida como “niebla mental”. Esta semana, al cumplirse un año de los primeros casos de covid-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó este problema dentro del “misterio de la covid larga”, que también ocasiona otras afecciones neurocognitivas, cardíacas y respiratorias.

“ Hay una primera etapa cuando cursas el SARS-CoV-2 en el que covid agudo, que duran entre dos y tres semanas, el 90% de las personas que la cursan lo hacen de manera moderada, sin asistencia respiratoria y la gente que llega a terapia intensiva son poquitos, superado el cuadro agudo-leve o moderado, superas con una respuesta inmune y destruis al virus. No existe más el virus. Lo que sucede es que hay un porcentaje de los  pacientes que hacen un covid tardío o largo, que hacen una serie de síndromes que siguen presentandose despues del periodo agudo, no lo sufre toda la gente, el porcentaje es entre el 10-25% de los que superan el covid agudo. Los síndromes tienen varios órganos o tejidos nuestros, hay personas que se le inflaman las articulación, hay personas que tienen sentimiento de cansancio, hay personas que tienen inflamación del corazón, y hay otras que tienen dificultades en la concentración que es la “niebla mental”,  explicò.

“Estos síndromes afectan al 25%  de las personas que tuvieron covid, no tiene relación con la gravedad del cuadro inicial”, puntualizó. El especialista afirmó también que si una persona que tuvo covid se vuelve a contagiar, la persona tiene ventaja porque su cuerpo tiene una respuesta inmunológica más fuerte que el que no cursó la enfermedad. Destacò que es importante la consulta con el médico de cabecera después del alta epidemiológico.

“El descanso es muy importante para favorecer la recuperación y la alimentación saludable, a los atletas no se le permite volver a entrenar antes de los seis meses después de superar la infección”, finalizó.