“Pusimos en práctica lo que aprendimos en nuestra formación“, dijeron. Uno de los cabos de la Policía de Corrientes que salvó la vida de un padre y su hijo quienes sufrieron una fuerte descarga eléctrica, contó que ambos estaban intentando reparar una instalación en la vereda porque se encontraban sin luz en la vivienda.
Ocurrió en la zona de la bajada del Astillero en el barrio Virgen de los Dolores.
El cabo de Policía, Roberto Pereyra, comentó que el lunes “me encontraba de servicio con el sargento Benítez que estaba en base, fueron alertados por los vecinos, estábamos de recorrida, bajamos con el sargento Insaurralde y el cabo Insaurralde y el cabo Sosa”.
El cabo describió que “al llegar al lugar nos encontramos con vecinos exaltados y vimos al padre con mayor pulso y el menor casi sin pulso, esperábamos la ambulancia”.
“El padre fue reanimado por los vecinos y nosotros y en la parte de atrás de la camioneta vi que la lengua obstruía la vía respiratoria y empecé a hacer acciones de RCP”.
Agregó que “tratamos de llegar lo más rápido posible al hospital y mientras hacerlo reaccionar”.
El cabo Pereyra, comentó que “nos acercamos esta mañana al nosocomio, el menor está en el Pediátrico Juan Pablo Segundo, en terapia, muy delicado y el padre estaba bien, tiene que seguir en observación por 48 horas”.
Sobre la circunstancia del hecho, el cabo Pereyra expresó que “el niño tiene 14 años y estaba ayudando al padre a realizar una instalación eléctrica, estaban sin luz, tratando de restablecer la luz”.
