El argentino disputó más de 18 minutos en el ajustado triunfo ante Sacramento, con seis asistencias. Jokic, otra vez gigante.

Buena noche para Facundo Campazzo. Fueron 18 minutos, dos puntos, seis asistencias, cuatro rebotes y un robo para el argentino en el ajustado triunfo de Denver Nuggetspor 106 a 100 sobre los Sacramento Kings, en lo que fue la cuarta victoria consecutiva para el equipo de Michael Malone, que en la cancha comanda el imparable serbio Nikola Jokic (38 puntos).

Campazzo fue importante en la construcción de juego y sobre todo con sus seis asistencias, una menos que la bestia Jokic y tercero en el rubro en el partido, atrás de las 10 de su rival De’Aaron Fox. Detalle no menor es que Facu jugó 18 minutos y tanto Jokic como Fox estuvieron más de 35 en la cancha.

En su mejor momento de la noche, el base argentino asistió con un excelente pase a su compañero Bryn Forbes para un triple e inmediatamente ayudó a recuperar la pelota, se fue solo contra el canasto y prefirió esperar a JaMychal Green para servirle una volcada. Insoportable en defensa para los rivales, delivery de lujo para los compañeros.

Campazzo volvió a tener buenos minutos en la rotación del equipo ante un inconveniente en la rodilla derecha de Bones Hyland, quien aparece regularmente como base suplente. Hyland se puso por delante de Facu en la consideración del entrenador gracias a su aporte ofensivo, una parte del juego que el argentino no logra mejorar (apenas uno de cinco en tiros de campo contra Sacramento esta madrugada).

El rey, como casi todas las noches, fue el mayúsculo Nikola Jokic, quien sumó más de 30 puntos por tercer juego consecutivo y se quedó a las puertas de otro triple doble. Estadísticas prácticamente ridículas: 38 tantos, 18 rebotes, siete asistencias, un robo y dos tapas para el serbio.

Para ilustrar el abrumador rendimiento del Joker hace falta hablar de sus últimos tres partidos. Con 63% en tiros de campo, fue la peor de sus últimas tres noches en cancha en cuanto a porcentaje, ya que venía de 71% contra Golden State Warriors y 73% contra New Orleans Pelicans. Aún así, metió 38 puntos. Un completo animal y, claro, candidato a quedarse nuevamente con el premio al MVP.