Con gol de José López, el Granate superó por 1-0 al Rojo en Avellaneda, donde jugó 45 minutos con uno menos. Alan Velasco se salvó de la roja por empujar de atrás a Tomás Belmonte, quien terminó viendo la segunda tarjeta amarilla por una infracción que no existió sobre Domingo Blanco.
Con gol de José López, de cabeza, Lanús le ganó 1-0 a Independiente en un partido caliente y lidera en soledad la Liga Profesional, por lo menos hasta que mañana juegue Talleres. Todo el entusiasmo que se plasmó en la previa, quedó en expectativa por lo poco demostrado en cancha, sobre todo en la primera mitad.
Faltó juego y elaboración porque nadie se quería equivocar. Si bien Lanús tuvo la más clara a través de Lautaro Acosta, Independiente dominó hasta que el partido se volvió ordinario por la polémica expulsión de Tomás Belmonte, quien protagonizó un picante cruce con Alan Velasco y luego vio la segunda tarjeta amarilla por una infracción sobre Domingo Blanco que no existió.
El ex Defensa y Justicia se escapaba en la mitad de la cancha, cayó cuando era perseguido por Belmonte (cae producto de un manotazo del mediocampista de Independiente) y el árbitro Silvio Trucco consideró que era para amarilla: ya tenía una y al vestuario.
En el camino a las duchas, Belmonte (habría realizado algunos gestos) se cruzó con una persona allegada al Rojo, y provocó las corridas y empujones que terminaron quedando en el tumulto. Hubo bronca en Lanús porque Trucco perdonó antes a Velasco, a quien solo amonestó por reaccionar y empujar de atrás a su colega.
Ya en el complemento, el golpe lo dio la visita a los cuatro minutos: José López le ganó la espalda a Sergio Barreto y anotó, de cabeza, el 1-0 ante Independiente tras un tiro libre desde la derecha. Julio César Falcioni estaba abajo en el marcador y con un hombre de más, por lo que decidió mandar a la cancha a Jonathan Herrera y apostar por el doble nueve.
Independiente buscó hasta con Juan Manuel Insaurralde proyectándose en ataque, aunque sin mucha imaginación. Lanús, en tanto, no se expuso y solo atacó con una media vuelta de José Sand dentro del área que se fue apenas por arriba. En el banco, el entrenador Luis Zubeldía tampoco movía las piezas.
El tiempo se consumía y Falcioni agotaba los cambios mandando a la cancha a los pibes, quienes se adueñaron, sin éxito, de todos los ataques. Rodrigo Márquez, Tomás Pozzo e Insaurralde tuvieron las últimas, pero el que terminó festejando en Avellaneda fue Lanús, uno de los candidatos a quedarse con la Liga Profesional con 23 puntos, hoy cuatro más que su rival.
