En el segundo tiempo del partido con San Jorge, Mandiyú jugó bien, de que él en el entretiempo les diera un buen lavado de cabeza con mucho shampoo a sus jugadores, como dijo.

 

 

Pablo Suarez coincidió con nosotros en una cosa: Mandiyú no jugó bien al principio, pero luego del “shampoo” se vivió algo diferente en el equipo.

 

 

“No hicimos un buen primer tiempo, otra vez salimos dormidos, nos manejaron el medio campo y nuestros hombres se pararon mal y así perdimos el control de la pelota. Nos volvieron a hacer un gol de pelota parada, similar al que ya nos han hecho en otros partidos y sobre lo cual trabajamos bastante. Pero una desatención nuestra le terminó dando el gol a ellos”.

 

 

Palabras más, palabras menos, fue lo que dijo Pablo con relación al primer tiempo, y coincidimos en un todo con su visión. Después, el técnico pasó a hablar del segundo tiempo.

 

 

“En el entretiempo hubo shampoo, un buen lavado de cabeza, se habló de los errores que estaban cometiendo, de cómo nos estaban manejando la mitad de cancha, no podía ser que jugáramos de la manera en la que lo hicimos, los jugadores me entendieron y se corrigieron las cosas".

 

 

"Pasamos a tener el control del partido. Y el ingreso de Romero nos terminó dando la cuota de fútbol que no estábamos teniendo”.

 

 

Después, cuando le preguntamos al entrenador sobre la posibilidad de volver a jugar con una línea de tres en la defensa -considerando que él nos había manifestado que era ese su estilo, y teniendo en cuenta que ahora se necesita ganar-, nos manifestó, “a (Diego) Romero lo veníamos llevando despacio, él no hizo todo el trabajo de pretemporada igual que el resto, y no lo queremos apurar, por eso decidí ponerlo sólo unos minutos".

 

 

"Pero el jueves, cuando enfrentemos a Guaraní se verá otro equipo, saldremos a buscar la victoria que nos permita viajar el próximo fin de semana a Salta con la satisfacción de irnos en ganador y así jugar con otra predisposición”, cerró 'el Flaco'.