El empresario santacruceño se presentó ante la Corte Suprema de aquel país, pero la UIF está intentando, desde Argentina, evitar que prospere la solicitud.

El empresario Lázaro Báez, preso por presuntas causas de corrupción durante la era K, reclamó ante la Corte Suprema de Bahamas que le desbloqueen el acceso a dos cuentas, entre las cuales suma alrededor de cuatro millones de dólares.

Dichos activos que fueron encontrados el año pasado y llevaron a que la semana pasada uno de los hijos de Báez sea detenido. En esta oportunidad, el empresario se presentó ante la Corte de Bahamas para pedir que se liberen estos fondos.

La cuenta fue bloqueada por la Justicia argentina en agosto pasado, a raíz de un hallazgo de la Unidad de Información Financiera (UIF), a partir de informes de los servicios de inteligencia. El pedido de Báez es para que se liberen unos 2,981,646.12 de dólares en la cuenta 590201 y unos 1,009,391.16 en la subcuenta 590207, ambos en el Banco CBH LDT de Bahamas.

Al investigar el historial de esos fondos, la Justicia detectó que en 2015 Martín Báez, a través de la sociedad Kinski, había depositado unos 10 millones de dólares.

Por ello, a raíz del faltante de más de 5 millones de dólares es por lo que Martín Báez fue detenido al haber violado la inhibición judicial decretada en su contra en el año 2016 y retirar fondos de aquella cuenta.

Ahora, ante el pedido de Báez de desbloquear esos fondos, la Cancillería tomó conocimiento de manera informal y lo comunicó al Tribunal Oral Federal 4 el que lleva adelante actualmente el juicio en la causa conocida como la “ruta del dinero K”.

El presidente del Tribunal, Guillermo Costabel, ratificó el bloqueo impuesto semanas atrás sobre los fondos y remitió a la Corte de Bahamas documentación de la causa sobre lavado de dinero y las maniobras de Báez y sus hijos.

Por su parte, tanto la UIF como el fiscal Abel Córdoba realizan gestiones por su lado para intentar hacer fracasar el planteo de Báez y liberar los fondos, indicó la agencia de noticias NA.