Con pistolas automáticas, revólveres, escopetas; tiro a tiro, ráfagas. Así, con decenas de disparos al aire y gestos que denotaban tanto fiereza como furia, jóvenes de distintas edades saludaron en la villa Zavaleta el paso del cortejo fúnebre que llevaba los restos de Yoel Zelaya, el adolescente de 16 años que murió el domingo en el hospital Penna, en el que estaba internado desde el viernes, luego de que, según se presume, fuera herido por el médico Ernesto Crescenti, al que una banda intentó asaltar en la puerta de su casa, en Parque Chacabuco.

Despedida en el funeral del jóven de 16 años en Villa Zavaleta

Las tremendas imágenes de las “salvas” en el cierre del funeral, realizado ayer en el asentamiento más grande de la ciudad, situado entre Barracas y Nueva Pompeya, fueron registradas con celulares. Varios de esos registros se viralizaron a través de las redes sociales. En ese contexto, el Ministerio de Seguridad de la Nación hizo una presentación en la Justicia para que se investigue el hecho. Según esa denuncia, la escena transcurrió durante el velatorio de Yoel en la manzana 21 y las vías, a la altura de Zavaleta al 1600. Según pudo saber de fuentes policiales, los tiros al aire se produjeron específicamente en la plaza “Kevin”.

Fuentes de la investigación dijeron que luego de que se certificara la muerte de Yoel y se completara la ablación de órganos con fines de trasplante, la fiscal Betina Vota, que tiene a su cargo la dilucidación de los hechos, ordenó que el proyectil sea sometido a un análisis de balística para determinar si salió de la pistola Glock .357 de la cual el galeno es legítimo usuario, con permiso de portación, según se estableció. El resultado de ese estudio todavía no llegó a manos del magistrado, por lo que aún no se determinó fehacientemente que el joven haya muerto producto de uno de los disparos de Crescenti.

El hecho se produjo el viernes a las 20.50, cuando Crescenti, de 65 años, había llegado a su casa, en Santander al 500, Parque Chacabuco, al término de sus vacaciones. Bajaba las valijas de su camioneta Toyota RAV4 cuando fue sorprendido por cuatro asaltantes.